Por: Rafael Santiago Medina, 19/08/2025
“Siendo tan integralmente indivisible el sistema de electrificación de Puerto Rico, es lógico inferir que su privatización mediante la fragmentación de las funciones de transmisión y distribución separadas de la de generación fue un garrafal disparate, del cual estamos viendo las consecuencias. En ocasiones anteriores, las dos empresas privatizadoras se echan una a la otra las fallas de operación del sistema de electrificación. Ninguna de ellas ha querido cargar con la responsabilidad”.